Establecimientos comerciales: Prácticamente todas las tiendas físicas, que abarcan desde tiendas de ropa y electrónica hasta supermercados, aceptan tarjetas de crédito.

Gastronomía: La gran mayoría de los restaurantes aceptan pagos con tarjeta de crédito, ya sea para abonar la cuenta en el lugar o para realizar pedidos de comida a domicilio.

Compras en línea: Grandes plataformas como Amazon y eBay, junto con numerosos sitios web, admiten pagos con tarjetas de crédito. Además, puedes utilizar tu tarjeta de crédito para comprar en aplicaciones móviles.

Servicios públicos y proveedores: Empresas de telefonía móvil, aseguradoras y servicios públicos permiten a los clientes pagar sus facturas utilizando tarjetas de crédito.

Viajes y alojamiento: Las tarjetas de crédito son útiles para reservar hoteles, comprar boletos de avión, alquilar vehículos y pagar servicios relacionados con los viajes.

Estaciones de servicio: En muchas gasolineras, puedes efectuar pagos con tarjetas de crédito directamente en el surtidor.

Entretenimiento: Cines, teatros, parques temáticos y otros lugares de entretenimiento generalmente aceptan tarjetas de crédito.

Servicios de suscripción: Plataformas de streaming como Netflix, Spotify y otros servicios similares permiten a los usuarios pagar sus suscripciones mensuales con tarjetas de crédito.